5 Diciembre 2025

Denise Marie Scalzo: «Promover una cultura de encuentro pacífico entre palestinos e israelíes»

de JEANNE AMIGUES

Las exposiciones internacionales ofrecen siempre la ocasión de conocer a personas inspiradoras. En esta entrevista, Denise Marie Scalzo, miembro fundador de la Franciscan Foundation for the Holy Land (con sede en San Diego, California), repasa su larga relación con Tierra Santa. Franciscana seglar, consejera para Tierra Santa y miembro de la Lugartenencia del Oeste de la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén, Denise Marie Scalzo comparte una perspectiva estadounidense sobre el proyecto museístico y sobre la exposición que se presenta actualmente en The Frick Collection.

Denise con padre Stephane, Jeanne Amigues, John Edward Puodziunas, Michael Espiritu y Benoît Constensoux.

¿Cómo comenzó su historia de amor con Tierra Santa?

Todo comenzó en 1992, poco después de la Guerra del Golfo. Guiada por mi director espiritual, un fraile franciscano, descubrí Tierra Santa por primera vez. Ese primer viaje fue decisivo: quería comprender la historia de mi fe católica.

Usted es una de las fundadoras de la Franciscan Foundation for the Holy Land en Estados Unidos. ¿Cuáles son sus áreas de acción?

Nacida con el propósito de responder a los crecientes desafíos a los que se enfrentan los cristianos de Tierra Santa, la Franciscan Foundation for the Holy Land tiene como misión principal apoyar y preservar a esta comunidad ofreciendo recursos concretos que le permitan permanecer en su tierra de origen. Con un enfoque profundamente humanitario, la Fundación trabaja para que las familias no solo sobrevivan, sino también prosperen.
Entre los programas que apoya se incluyen becas universitarias, ayuda a la educación primaria y secundaria, formación profesional y técnica, el programa musical Magnificat y diversos proyectos de vivienda.

¿Cómo descubrió el proyecto del Terra Sancta Museum?

Mientras trabajaba en el proyecto de renovación del Santo Sepulcro, conocí al hermano Stéphane Milovitch. Me mostró algunas piezas excepcionales procedentes del Tesoro del Santo Sepulcro. Quedé inmediatamente cautivada por la calidad de estas obras y por la amplitud del proyecto. Cuando supe que se organizaría una exposición en Estados Unidos, en colaboración con el conservador jefe de The Frick Collection, Xavier Salomon, quise apoyar esta iniciativa.

Como estadounidense comprometida con el servicio a los cristianos de Tierra Santa, ¿qué piensa de este proyecto cultural en Jerusalén?

La instalación del museo en el corazón de la Ciudad Vieja, en el convento de San Salvador, tiene un valor profundamente simbólico. Expresa la voluntad de promover una cultura de encuentro pacífico entre palestinos e israelíes. Este proyecto cultural también manifiesta el deseo de profundizar en la comprensión de la historia cristiana de la región y de poner en valor la presencia cristiana occidental en Tierra Santa.


El museo será un espacio de aprendizaje abierto a todos, especialmente a las nuevas generaciones, escolares y estudiantes, gracias a actividades educativas, participativas y de sensibilización.

Denise con una dama de la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro.
Denise en compañía de algunos de los participantes de la Frick Collection.

La exposición presentada en la Frick Collection, y próximamente en el Kimbell Art Museum (Ft. Worth, TX), desempeña un papel importante en la puesta en valor de las colecciones del Terra Sancta Museum. Pero ¿cómo puede reforzar o despertar un vínculo con los Lugares Santos?

La exposición en The Frick Collection de Nueva York, y próximamente en Fort Worth, ha suscitado un profundo interés. Constituye una herramienta pedagógica extraordinaria para comprender mejor nuestro patrimonio cristiano. Los visitantes suelen quedar maravillados ante la belleza de las piezas y las historias que transmiten. Las conferencias impartidas por el hermano Stéphane y por Xavier Salomon enriquecen aún más la experiencia. El entusiasmo es tal que muchos recomiendan la exposición a su entorno.

Gracias al boca a boca y a la creciente cobertura mediática, la exposición está ganando visibilidad más allá de las fronteras estadounidenses. Despierta el interés de múltiples ámbitos: amigos, peregrinos, mecenas. Este proyecto ofrece una oportunidad única para reavivar el apego a los Lugares Santos, fortalecer los vínculos espirituales y culturales entre los pueblos y sensibilizar al público sobre la necesidad de preservar este patrimonio común.

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